Este blog tiene el objetivo de compilar y poner a disposición temas importantes de la Lengua Española. Además de ser utilizado como un medio para publicar prácticas que puedan ser utilizadas por mis estudiantes.
viernes, 19 de diciembre de 2014
domingo, 23 de noviembre de 2014
La adquisición de la competencia escrita: una necesidad fundamental
La adquisición de la competencia escrita:
una
necesidad fundamental
“Nada como el contacto
físico y visual con la página impresa, con el olor a tinta,
con el delicioso placer
de los ojos, paseándose por las letras que conforman
palabras, pensamientos,
sentimientos y sensaciones. El libro es
el verdadero y legítimo
hogar de la palabra escrita... ” (Omar Mesones)
Para el desarrollo del ser humano está pautado, básicamente por los
centros educativos, el desarrollo de la competencia comunicativa, que incluye,
aparte de la competencia oral, la competencia de la escritura, que es fundamental para el desarrollo
académico y personal. Pues, aunque la oralidad es lo más común, la escritura es
un modo de registrar la producción de nuestras ideas lo que permitirá que en
los próximos días o años podamos hacer una re-construcción de esos
conocimientos. Lamentablemente, a veces en el proceso ocurren algunos trastornos,
como: las afasias, el retraso lector, las disgrafías, la distografía y la
dislexia.
En las Bases de Revisión y Actualización Curricular (2013) dice que la
competencia comunicativa implica el
dominio progresivo de las características y condiciones de distintas
situaciones de comunicación: intenciones comunicativas, roles asumidos por los
y las participantes y características del contexto en el que se produce la
comunicación. Asimismo, es necesario el reconocimiento y utilización
estratégica de los diversos tipos de texto orales y escritos en la comprensión
y producción.
Varios autores han hecho sus aportes sobre la habilidad de la escritura. Crystal,
1987; Garman, 1990; Simpson, 1985; citados por Berko (1999), sostienen que
todas las culturas humanas poseen lenguajes orales o de signos (o ambos). Sin
embargo, no todos los lenguajes incluyen un sistema de escritura asociada, y es evidente que la escritura es un
desarrollo mucho más reciente que el habla en la historia de los seres
humanos.
Según Luria, citado por González Nieto,
“El lenguaje escrito es el instrumento esencial para los procesos de
pensamiento incluyendo, por una parte operaciones conscientes con categorías
verbales, (...) permitiendo por otra parte volver a lo ya escrito, garantiza el
control consciente sobre las operaciones que se realizan. Todo esto hace del
lenguaje escrito un poderoso instrumento para precisar y elaborar el proceso de
pensamiento”.
Para Vigostsky, citado por González Nieto, “El lenguaje escrito requiere trabajo consciente,
puesto que su relación con el lenguaje interiorizado es distinto de la del
lenguaje oral. Hasta se podría decir que la sintaxis del lenguaje interiorizado
es exactamente lo opuesto de la sintaxis del lenguaje escrito…”
Según Casalmiglia y Tusón (2001), la
característica más importante de la adquisición de la competencia escrita es
que está sometida a un aprendizaje institucionalizado, que tiene lugar en
centros de instrucción y de educación. A pesar de que la lengua escrita está
presente en el entorno cotidiano, el aprendizaje del código exige un
adiestramiento y una preparación específica. La alfabetización es la condición
básica, el billete de entrada para el acceso a la cultura escrita, que, en el
mundo occidental, forma el depósito de los conocimientos. La capacidad de leer
—en el sentido de comprender, contextualizar, interpretar textos elaborados, y
la capacidad de escribir para dar cuenta de la adquisición de estos
conocimientos se ha convertido en el eje fundamental de la instrucción. A lo
largo de todos los ciclos de la enseñanza se hace necesario para quien estudia
progresar en la conciencia lingüística y la descontextualización que se
requiere para leer y comprender explicaciones cada vez más abstractas,
especializadas y complejas. Todo el currículo educativo se basa en aprender a
operar con sistemas de representación de la realidad, principalmente escritos.
Entre otras, la escritura, diferente a la oralidad, tiene estas
características: se adquiere mediante procesos sistemáticos, se desarrolla gradualmente, la alfabetización es
la condición básica, en el ámbito laboral se generan actividades escritas
con valor funcional, basado en un proceso normativo, la estructura formal
depende de la intención y permite la producción y re-construcción del
conocimiento.
En definitiva, lo más importante es enfocarse en asumir el compromiso de
desarrollar en nuestros estudiantes y en uno mismo la competencia de la
escritura. Para esto aquí presento algunas recomendaciones citadas por
Casalmiglia: Dedicar tiempo a pensar antes de empezar a redactar, buscar formas
de expresión alternativas para expresar la misma idea si no nos satisface, tener
en cuenta todo el texto al redactar cada fragmento, ser flexibles para
modificar el plan inicial y la estructura prevista.
Para escribir bien: leer mucho, tomar conciencia de la audiencia que
leerá el escrito, planificar los objetivos del texto, releer los fragmentos
escritos para cuidar la cohesión, utilizar estrategias de apoyo: consultas
sobre saber enciclopédico, diccionarios, gramáticas, otras personas.
Finalmente, algunas sugerencias para escribir mejor: póngase cómodo y
prepárese para estar solo, reescriba, no copie a nadie, concretice, humanice,
metaforice, escriba por partes, revise
primero lo primero y después el estilo y después la presentación del escrito, guíe
al lector, repita palabras, si hace
falta, no se enamore de las palabras, y menos de las difíciles, varíe los
patrones oracionales, cincele sus párrafos, sea buen lector de sí mismo.
Bibliografía
Ø
Calsamiglia, Helena; Tusón, Amparo (2001). Las cosas del decir. España: Editorial
Ariel, S.A.
Ø
González Nieto, Luís (2001). Teoría Lingüística y Enseñanza de la Lengua.
Madrid, España.
Ø
República Dominicana. Ministerio de Educación. Revisión y Actualización Curricular (2013).
Santo Domingo, D.N.
domingo, 16 de noviembre de 2014
Modalidades discursivas orales: sus múltiples explicaciones
“La noble conversación es hija del discurso, madre del
saber, desahogo del alma, comercio de los corazones, vínculo de la amistad,
pasto del contento y ocupación de personas”
Baltasar Gracián
Modalidades
discursivas es un concepto que extrañamente se le ha dado diferentes
definiciones y tratamientos, lo que ha provocado muchas confusiones y malas utilizaciones
por parte de profesores y estudiantes. Entre otros nombres se les ha llamado:
actos de habla, secuencias textuales, tipos de textos, modos de organización
del discurso y estrategias discursivas.
A pesar de todo, muchos las utilizan en la vida práctica, en diferentes
ámbitos, sin estresarse pensando en su definición ideal.
La facultad que
tenemos los seres humanos, el lenguaje, se concreta o se ponen en
funcionamiento a través de dos medios principales que todos conocemos: la
oralidad y la escritura. Cada una de ellas tiene sus diferencias, sin embargo,
en ocasiones se coayudan en momentos de producir discursos.
Según Casalmiglia y Tusón (2001),
las características de la oralidad, entre otras, son las siguientes: se
adquiere informalmente, en el ambiente familiar, se desarrolla
conforme a las necesidades, no requiere sistematicidad, alternancia
de turnos, es natural, aunque no
siempre, su función básica son las relaciones sociales, cumple funciones
estéticas y lúdicas, puede adquirir diferentes grados de formalidad, aunque se
formal, en ocasiones surge la improvisación y genera conversación, permite la
comunicación entre miradas, gestos, bostezos, aplausos... En fin, entendemos la
conversación espontánea como la forma primera, primaria y universal de realización
de la oralidad; como la forma más característica en que las personas se
relacionan y llevan a cabo sus actividades cotidianas como seres sociales; como
una forma de acción social; como protogénero o prototipo del que derivan todas
las demás formas de realización discursiva.
La
modalidad oral se puede desarrollar de formas informales hasta altos grados de
formalidad. Informales serían: los saludos, excusas, elogios / halagos,
peticiones, ofrecimientos…Formales serían: conferencia, juicio, debate, asamblea, servicio religioso…
También,
los canales utilizados para almacenar la voz y hacerla llegar a las masas son
distintas a la escritura: teléfono, radio, televisión, grabadora, CD, reproductores
multimedia, celulares y otros más aparados de los que la tecnología moderna ha
puesto a disposición.
Otras prácticas discursivas orales
relacionadas con diferentes ámbitos son las siguientes:
Ámbito
Administrativo
Jurídico
Religioso
Político
Periodístico
Literario
Científico
Medico
Académico
Instituciones y organizaciones
Publicitario
Vida cotidiana
|
Practicas
discursivas
Interacciones en las ventanillas
Interrogatorios, juicios
Sermones, confesión, oraciones
Mítines, debates, congresos
Reportajes, entrevistas, noticiarios
Teatro, canciones, cuentos
Comunicación, ponencia, conferencia
Visita médica, reunión clínica
Exámenes orales, defensa de tesis
Reuniones, cursos de formación
Eslóganes, anuncios
Conversaciones, entrevistas
|
Esto se parece al planteamiento de
Batjín (1998), quien dice que “las diversas esferas de la actividad humana
están todas relacionadas con el uso de la lengua. Por eso está claro que el
carácter y las formas de su uso son tan multiformes como las esferas de la
actividad humana, lo cual, desde luego, en nada contradice a la unidad nacional
de la lengua”. Esto, aunque el le llama a muchas de estas clasificaciones:
“géneros discursivos”.
Por
otro lado, se le llama modalidades discursivas a estos conceptos: narración,
descripción, argumentación, instrucción y exposición. Algunos autores, citados
por Casalmiglia y Tusón (2001), les tienen otros nombres: “Secuencias textuales
o tipos de textos” (Adam); “modos de organización del discurso” (Charaudeau). El
criterio de selección de estos tipos de texto tiene que ver con la finalidad
del texto en cada caso concreto. Así, por ejemplo: Narrativo, si su
finalidad es informar sobre acciones o hechos reales o imaginarios.
Descriptivo, si su finalidad es dar detalles de cómo son las personas, animales
y objetos. Argumentativo, si su finalidad es defender y/o rebatir
opiniones e ideas para convencer y persuadir. Expositivo, si su finalidad es
informar con el fin de hacer entender algo a alguien (una idea, un concepto, un
hecho...) con una intención didáctica. Instructivo, si su finalidad es que el
receptor aprenda a hacer una cosa. Si un texto cumple varias finalidades, a la
hora de clasificarlo en un tipo específico, se elige la finalidad dominante.
Bartolo García (2014), agrega a este listado “la
enumeración” y
agrega: “La enumeración se diferencia de la narración en que en esta última
transcurre el tiempo y en que hay personajes que desarrollan acciones; mientras
que mediante la primera se podría enumerar acciones sin que transcurra el
tiempo. Se diferencia de la descripción
en que en esta se caracterizan (o desglosan los rasgos de) personas,
animales o cosa; mientras que la enumeración distribuye las personas, los
animales o las cosas. De ahí, que en la narración, la categoría léxica más
importante sea el verbo conjugado; en la descripción, el adjetivo; y en la
enumeración el sustantivo”.
Asumo
definitivamente, una combinación de estas posturas, pues ambas mantienen muchas
relaciones con los ámbitos y las prácticas discursivas ya conocidas. Además,
resulta innovador y aceptable el término “estrategias discursivas”, junto a la
inclusión del concepto enumeración del Dr. García Molina.
Bibliografía
Ø Batjin, Mijaíl (1998). Estética de la creación verbal. Octava edición. Rusia: Siglo XXI
Ediciones.
Ø García Molina, Bartolo (2014). El discurso: categorías y estrategias. 1ra.
Edición. Santo Domingo, R.D.: Editorial Surco.
Ø Calsamiglia, Helena; Tusón, Amparo
(2001). Las cosas del decir. 1ra.
Edición. España: Editorial Ariel, S.A.
martes, 11 de noviembre de 2014
domingo, 9 de noviembre de 2014
viernes, 7 de noviembre de 2014
jueves, 6 de noviembre de 2014
sábado, 25 de octubre de 2014
Recursos Literarios
La literatura la constituyen textos de muy diversos tipos
-cuentos, novelas, poesía, obras de teatro-, en los que, con una intención eminentemente
artística, muchas veces se presentan mundos de ficción y el lenguaje es
utilizado de una manera especial.
El
lenguaje literario
La finalidad, como decíamos antes, del lenguaje literario
es artística, de tal manera que el lenguaje toma gran importancia, pues sobre
él radica muchas veces la atención. Por ello toma importancia el estilo en un
texto literario, es decir, la forma de utilizar el lenguaje por una época o
autor. Es por eso por lo que el autor emplea un vocabulario y unos recursos que
alejan su texto del lenguaje cotidiano y llaman la atención sobre él.
Los
recursos literarios
Contenido y forma van íntimamente unidos en un texto
literario, de tal modo que el primero condiciona, en muchas ocasiones, a lo
segundo. Lo que define principalmente a un texto literario es la forma, pues no
hay un contenido especialmente literario. Por tanto, el escritor, para
conseguir la atracción del lector, dedicará más atención al lenguaje literario,
sobre todo en lo referido a las formas de elocución y a los distintos recursos
que pueden ser de diverso tipo (gráficos, fónicos, morfológicos, sintácticos,
semánticos).
Figuras
literarias
Un tipo especial de recursos literarios son las figuras
literarias o figuras retóricas, las cuales son mecanismos utilizados por el
escritor para embellecer el lenguaje y manipular su pensamiento o su manera de
escribir, dando un sentido figurado, no denotativo, a sus palabras. Más que
aprenderlas de memoria, conviene apreciar su sentido de extrañeza y fuerza
expresiva. Éstas son algunas:
· Polisíndeton: Ocurre cuando se repite
una misma conjunción entre varios nombres de una cláusula:
¿Quién te sanó
Y quien te salvo
Y quien subió al cielo
Y quien viene por segunda vez?
· Asíndeton: Suprime las conjunciones
para dar rapidez a la cláusula:
Rendí, rompí, derribe,
Rajé, deshice, prendí,
Desafié, desmentí,
Vencí, acuchille, maté.
· Anáfora: Es la repetición de una
palabra al comienzo de una cláusula:
Verde nativo,
Verde de hierba que sueña,
Verde sencillo,
Verde de conciencia humana…
· Reduplicación:
Es la
repetición consecutiva de unas palabras al principio de la oración:
Luna, luna, luna, luna
Dile que vuelva.
· Onomatopeya: Imitación de los sonidos
mediante la fonética de la lengua:
“El zumbido de las abejas es muy
parecido al chirrido de la puerta al arrastrarse”
· Epíteto: Es un adjetivo antepuesto:
pobre hombre, hermosa joven.
· Prosopopeya: Es atribuir a las cosas
inanimadas características de acciones propias del hombre:
“Guitarra dile que vuelva a darme un
poco de querer, dile que todo terminó cuando se fue”
· Antítesis: Es una contraposición
entre dos ideas:
“Yo lloro cuando tu cantas; yo leo
cuando tu juegas”
· Paradoja: Enlaza dos ideas
aparentemente opuestas, pero que llegan a conciliarse:
“Vivo sin vivir en mi
Y tan alta vida espero,
Que muero, porque no muero”
· Símil o comparación: Consiste en explicar una
cosa por medio de otra con la que guarda semejanza:
“Como enjambre de abejas irritadas es mi hermana”
“Como enjambre de abejas irritadas es mi hermana”
· Metáfora: Es una comparación donde
han desaparecido los términos comparativos: “Jehová es mi pastor y nada me faltará”
· Ironía: Consiste en decir en todo
de burla todo lo contrario a lo que expresa la letra:
“La República Dominicana
es el mejor país del mundo: matar mosquitos es una forma de entretenimiento
fabulosa, tenemos un plato exquisito llamada pica-pica y la gente se va a
viajar en yolas por placer”
· Hipérbole: Consiste en exagerar excesivamente
la realidad:
“Con mi llorar las piedra se quebrantan,
los árboles se inclinan, las aves se condolecen, el mar se embravece… por
favor, vuelve”
· Imprecación: Consiste en desear mal
para uno mismo o para los demás:
¡Que
las penas te ahoguen, que arrastres una maldición, que te envenenen, es mas,
que te lleve el demonio!
· Concatenación: Consiste en la
repetición de palabras encadenadas; la frase o verso comienza con la palabra
que la precede. Intensifica el valor semántico y, a veces, ofrece gradación.
También se le llama “anadiplosis”
“Sobre el corazón un ancla
Y sobre el ancla
una estrella
Y sobre la estrella
el viento
Y sobre el viento
la vela”
· Hipérbaton: Consiste en la alteración del orden lógico de las palabras.
“Del
salón en el ángulo oscuro
De su dueño tal
vez olvidada,
Silenciosa y cubierta de polvo
Veíase el arpa”
· Metonimia: Figura consistente en
designar una cosa con el nombre de otra con la que guarda una relación de causa
a efecto, autor a sus obras, etc.
“Me tomé una fría”
“Tomar una copa”
“Se tomó dos vasos”
“La
mejor pluma de la
literatura universal es Cervantes”
lunes, 20 de octubre de 2014
sábado, 18 de octubre de 2014
Ejercicio de homosintaxis #1
- Agua que no has de beber, déjala correr
- Barriga llena, corazón contento.
- Dios los crió y el diablo los juntó.
- El que mucho abarca, poco aprieta.
- El puerco sabe donde se rasca.
- En casa de herrero, cuchillo de palo.
- Al que madruga, Dios lo ayuda.
- El que siembra en tierra ajena, pierde el fruto y la semilla
- El que viste de lo ajeno en la calle lo desnudan.
- El hombre precavido vale por dos.
- El que da lo que tiene a pedir se queda.
- Lo que hace con las manos lo desbarata con los pies.
- Más vale pájaro en mano que cientos volando.
- Más vale malo conocido que bueno por conocer.
- Más sabe el diablo por viejo que por diablo.
- No se deja camino real por vereda.
- Tanto da la gotera en la piedra hasta que hace el hoyo.
- Los tropezones hacen levantar los pies.
- Amo a mis amigos, no a sus defectos.
- Lo que el humano no perdona, lo perdona Dios.
- Una mentira repetida un millón de veces no deja de ser mentira.
- Más fácil es escribir sobre la maldad que vencerla.
- Cuando se busca el amor hay un riesgo; encontrarlo.
- Vivir sin Patria es lo mismo que vivir sin honor.
- A palabras necias, oídos sordos.
- No hagas a otros lo que no te gusta que te hagan.
- No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy.
- Nadie sabe lo que puede hasta que lo intenta.
- No van lejos los que van delante, si los de atrás corren bien.
- El que mucho abarca, poco aprieta.
sábado, 11 de octubre de 2014
La homosintaxis y sus variaciones
Es un procedimiento de formación de
textos copiando el estilo de otro texto. Mediante ella se asimilan o reproducen
los patrones sintácticos de textos preestablecidos. Por sus características
lúdicas, ayudan enormemente a perder el miedo a escribir; y además, a disfrutar
el acto de producir un texto.
Lo más importante es la forma, la
sintaxis. La estructura sintáctica ayuda a darle fuerza a las palabras y los
enunciados.
Eso es lo que pasa cuando hacemos una
parodia, que es, por ejemplo, cantar una canción con la misma forma, pero
cambiándole el contenido en tono de burla.
PUROS O ESTRICTOS
Por ejemplo:
“De tal palo, tal astilla”
“De tal padre, tal hijo”
“De tal maestro, tal el alumno”
“De tal universidad, tal profesional”
“De tal vaca, tal becerro”
FRASES QUEBRADAS
Son segmentos de frases o refranes
conocidos que el estudiante completara u organizara de manera lógica, pero
diferente a la expresión original. Ejemplo:
A palabras sordas……. oídos necios.
Más vale el diablo por…. delincuente
que por viejo.
Más vale un bueno por conocer… que
malos conocidos.
HAIKU
Es una estrofa de origen japonés,
compuesta de tres versos de 5, 7 y 5 silabas, respectivamente (aunque también
pueden ser versos libre); se caracteriza porque hace referencia a la
naturaleza, a las estaciones del año, o a los sentimientos o percepciones sobre
ellas parecen ellas. Parecen ideas sueltas, pero tienen un hilo sémico que las
relaciona. Si hay verbos en tiempo presente.
Ejemplo:
Cae la lluvia
Duermen los pájaros
Es el invierno.
COMPOSICIÓN DIAMANTINA
Es una composición de siete líneas
cuya diagramación se asemeja a la forma del diamante. En la primera y la
séptima líneas van siendo sustantivos de significados opuestos; en la segunda,
dos adjetivos referidos al sustantivo de la primera línea; en la tercera, tres
verbos conjugados en presente, referidos al sustantivo de la primera línea; en
la cuarta, cuatro sustantivos, dos referidos al primero y dos al de la séptima
línea; en la quinta, tres verbos conjugados en tiempo presente, referidos al
último sustantivo; y en la sexta, dos adjetivos referidos al último sustantivo;
y en la sexta, dos adjetivos referidos al último sustantivos (séptima línea).
Observe este ejemplo:
Progreso
Unifícate, Motivador
Incentiva, Impulsa, Avanza
Meta, Vida, Desidia, Vagancia
Empobrece, Degenera, Aniquila
Nostálgico, Traumático
Retroceso
LIMERIK
Esta técnica consiste en producir un
texto colectivo basándose en versos concatenados. La profesora o el profesor
propone el primer verso y una alumna o alumno propone el segundo, el cual debe
comenzar con el final del primero; y así sucesivamente, hasta que se estime
suficiente, porque esta es una técnica de nunca acabar. Ejemplo:
La tarde lluviosa me provoca
nostalgia
Nostalgia causada por la ausencia
Ausencia que arropa mi corazón
Mi corazón anhela tu llegada
Tu llegada llenaría mi vida de luz
Luz que irradiaría tu presencia
Presencia imprescindible para vivir
Vivir la plenitud de mi vida
¡Mi vida eres tú!
BIBLIOGRAFÍA
García Molina, Bartolo (2001).
Redacción (7ma. edición). República Dominicana: Editorial Surco.
¿Qué es una reseña literaria?
Una
reseña literaria es una
presentación oral o escrita de la opinión de un crítico sobre una obra,
justificada con hechos a incidentes específicos (pasajes) de la pieza en
cuestión.
Su propósito principal es dejar saber si vale
la pena leer el libro que está en discusión. Independientemente si el lector ha
leído la obra, el autor de la reseña debe incluir alguna información sobre el
contenido, sin olvidar nunca que el objetivo de la reseña es una presentación
de la opinión del crítico literario.
La reseña no debe confundirse con un reporte.
Un reporte es completamente comprensivo. Se limita a una presentación
totalmente objetiva de hechos: título, autor, género, precio, datos relacionados
con la publicación, condiciones bajo las cuales la obra fue producida,
construcción de los hechos, ilustraciones presentadas, etc...
Preparación
para hacer una reseña literaria:
Todo crítico debe seguir los siguientes pasos
antes de hacer una reseña literaria sobre un hecho o trabajo específico:
Evitar leer resúmenes, comentarios o propaganda
anterior a la lectura del libro.
Leer solamente cuando se está alerta y
dispuesto.
Leer con luz apropiada y con un mínimo de
distracciones a interrupciones.
Razonar cuidadosamente el título del libro o
trabajo y el significado e implicación.
Leer el prólogo para familiarizarse con la
intención del autor.
Leer la tabla de contenido (si esta existiera)
para enterarse de la organización básica del libro.
Conocer el género del libro o la obra para
poder juzgar de acuerdo a éste.
Tener una copia personal del libro o del
trabajo, si es posible, para poder hacer anotaciones según se va leyendo.
Si el libro no es propio, mantener hojas de
papel disponibles para anotar las reacciones a insertarlas en el libro.
Leer el libro en su totalidad para tener una
impresión general. Sobre esta impresión inicial, hacer un bosquejo mental de
cómo se va a trabajar en la reseña.
Leer el libro por segunda vez, en esta ocasión
para darle énfasis a aquellos detalles que pueden fortalecer la impresión
inicial o modificada.
Los elementos
expuestos a continuación se deben tener en cuenta en el arreglo para la
redacción de una reseña:
Punto
de vista: ¿Quién narra o interpreta? ¿Hay uno o son varios? ¿Está escrita en
primera o tercera persona? Título y prólogo: ¿Cuán preciso y
efectivo es el título? Habiendo leído la obra por completo, ¿siente que el
título crea un ambiente adecuado? ¿El título viene a ser lo suficientemente
significativo para estimular la lectura? ¿Fue el título lo que llamó la
atención del lector? Si el autor establece su propósito en el prólogo, ¿cuán
efectivo es éste? ¿Es necesario leer el prólogo para entender la obra?
Organización: ¿Cómo está organizado el trabajo? Si es
ficción, ¿está la historia contada cronológicamente o en retrospectiva? Si no
es ficción, ¿los capítulos están ordenados lógicamente? ¿Los títulos de los
capítulos son claros y concisos?
Estilo: ¿Qué estilo utiliza el autor? ¿Formal o
informal? ¿Qué hay acerca de la dicción? ¿Es muy difícil para el lector
promedio? ¿El estilo va dirigido a una audiencia especial?
Tema: ¿Cuál es el tema del trabajo u obra? ¿De
qué se está escribiendo? ¿Cuán evidente es? ¿Es ficción? ¿Es teatro? ¿Es poema?
¿Emplea el autor el simbolismo? ¿Es detectable este simbolismo para un lector
astuto? ¿Cuán convincente es el escritor?
Final: ¿Hay lógica entre el final y el punto
culminante? ¿Fue el autor hábil en la construcción del final? ¿El personaje
principal resuelve el conflicto satisfactoriamente, aunque no necesariamente la
obra tenga un final feliz? Después de terminada la lectura, ¿cómo se siente el
lector con relación al final? ¿Se olvida fácilmente o permanece en la memoria?
Precisión
de la información: Asumiendo que el crítico está calificado para juzgar, ¿cuán precisa
es la información ofrecida en el libro? ¿Están los hechos distorsionados de
alguna forma? ¿Se pueden notar prejuicios del autor? ¿Omitió eventos significativos
que afectarán la veracidad? ¿Las fuentes utilizadas son confiables? Si el
trabajo es ficción, ¿los hechos que provee el autor son creíbles y lógicos?
Artificios
literarios y descripción física: ¿Utiliza el autor la alusión o lenguaje
figurativo? ¿Qué esquema utiliza el libro? Si las fotografías y/o ilustraciones
son utilizadas, ¿son un complemento del trabajo o son rellenos del libro? ¿Son
las ilustraciones y gráficas claras y fáciles de entender? ¿Contiene el trabajo
una sobreabundancia de notas al calce? ¿Las notas aclaratorias son presentadas
de manera consistente al final del capítulo o del libro? ¿El esquema es
atractivo en general? ¿Cuán relevante es la cubierta del libro con relación al
contenido?
Los siguientes factores extrínsecos son importantes
en la evaluación de un trabajo: datos biográficos del autor, periodo
literario al que pertenece el libro o la obra, intenciones del autor
y calificaciones de éste con relación a la materia tratada: Es deber del
crítico familiarizarse con algunas de las características básicas del género.
También debe conocer acerca de la audiencia a la que el autor dirigió su obra y
por otro lado, a la que se le está reseñando. Antes de comenzar a redactar se
debe tener en consideración: edad, sexo, educación y trasfondo cultural del
público al que se le va a reseñar.
Se sugiere y es opcional leer otras críticas o
reseñas que se hayan hecho del libro, siempre y cuando se haya concluido la
lectura, para formar una opinión propia. Se debe recordar que las opiniones que
no son originales deben estar debidamente documentadas y acreditadas.
Es imprescindible intercalar información del
contenido de la obra reseñada con observaciones críticas y evaluativas, porque
es muy probable que el lector de la reseña no haya leído la obra.
Organización
y redacción de la reseña:
Revisar cuidadosamente todas las notas
marginales incluidas durante la lectura.
Reflexionar profundamente sobre éstas y las
ideas formuladas hasta que se Ilegue a una sola y única impresión.
Formular una hipótesis y redactarla.
Comenzar a bosquejar las ideas, dejándose
llevar por las anotaciones ya hechas.
Hacer una lista de aquellas notas que apoyen la
hipótesis formulada en tarjetas 4 x 6 y eliminar el resto.
Empezar a usar divisiones y subdivisiones de
ideas.
Cotejar cada componente: el bosquejo contra la
hipótesis, separando aquellos que sean relevantes y que apoyen la idea
principal.
AI comenzar a redactar la reseña, seguir el
bosquejo sin hacer cambios.
Proveer atención y énfasis a la introducción
del escrito. Debe incluir: la esencia de la hipótesis, una implicación de cómo
se propone desarrollarla, el matiz del trabajo, el título del libro reseñado y
el nombre del autor y los mejores argumentos que emplearán para defender la
hipótesis.
Intercalar los comentarios del contenido del
libro con observaciones críticas en el texto de la reseña.
Escribir una conclusión fuerte y dinámica, sin
términos inciertos y con mucha lógica. Nunca usar frases como
'en conclusión' o 'en suma' para iniciar el párrafo final ni tampoco utilizar 'el fin' o 'final' para terminar la redacción.
AI escribir el borrador debe dejarse tres
líneas por medio y márgenes amplios para revisiones futuras.
Es esencial tener a mano herramientas de
referencia como diccionarios y usarlos para la redacción de la reseña.
Antes de revisar por primera vez el borrador se
debe dejar un día por medio para poder hacer correcciones y cambios
objetivamente.
Leer lo redactado, por lo menos una vez en voz
alta. Hacer todas las correcciones necesarias y pasar en limpio de nuevo si
fuera necesario.
Si hay abundancia de correcciones, no dudar en
volver a pasar en limpio y escribir un segundo borrador.
Una vez se hayan hecho todas las revisiones y
correcciones y se esté convencido de que es la mejor versión, se procede a
escribir o mecanografiar la copia final, evitando errores ortográficos. Una vez
verificado todo el contenido se debe duplicar la reseña para mantener copias
adicionales de ésta.
Paráfrasis
Es la explicación del contenido de un texto para aclarar y facilitar la
asimilación de la información en todos sus aspectos.
La paráfrasis consiste en recrear con palabras más
sencillas y/o con el uso escaso de tecnicismos las ideas propias obtenidas en
un texto determinado, para facilitar su comprensión lectora. Así, podemos
expresar la información original extraída de este, de una forma diferente bajo
el mismo código de comunicación, la paráfrasis es una forma rápida y sencilla
de adquirir conocimientos ya que facilita el recordar lo leído.
La palabra española «paráfrasis»
procede de la latina paraphrăsis, que a su vez procede de la griega παράφρασις:
imitación del texto original, que se imita sin reproducirlo, empleando para
ello otro lenguaje, normalmente más sencillo y práctico.
Paráfrasis es también aquella «traducción» que da al
texto una visión clara, precisa y didáctica del mismo texto. Por traducción no
ha de entenderse aquí el cambio de un idioma a otro necesariamente, sino la
reescritura del texto original. Es en sí, una forma de resumir un texto con
palabras propias de un individuo con una cultura determinada.
Tipos de
paráfrasis
Paráfrasis
mecánica: Consiste en sustituir por
sinónimos o frases alternas las expresiones que aparezcan en un texto, con
cambios sintácticos mínimos.
Paráfrasis
constructiva: Consiste en la
reelaboración del enunciado, dando origen a otro con características muy
distintas, pero conservando el mismo significado.
Se hace uso de la paráfrasis en la exégesis de
textos literarios.
Por ejemplo, Fray Luis de León hizo versiones
parafrásticas del Cantar de los Cantares y del Libro de Job,
pertenecientes ambos al Antiguo Testamento.
Asimismo, se recurre a la paráfrasis en las traducciones de
un idioma.
También se consideran paráfrasis la prosificación del verso y la versificación de
la prosa.
También es un recurso didáctico y,
por tanto, un medio de adquisición de conocimiento:
Se aprovecha esta figura retórica para ejercitar la redacción.
Los profesores y los estudiantes hacen uso de la
paráfrasis cuando asimilan primero el contenido de una lección y después lo
expresan con palabras distintas, tratando de que nada esencial sea omitido por
el mismo por el cual se basa en la lectura para poder destacar una paráfrasis y
mejorar el entendimiento de las demás personas y público.
Es también un recurso que se basa en el uso de sinónimos para evitar repeticiones.
En el caso de palabras sin un equivalente, éstas pueden ser reemplazadas por
una locución o
por una frase.
Por otro lado, en el método alternativo de resolución de conflictos, una de los
principales recursos del mediador o conciliador es la paráfrasis:
repite la idea que ha transmitido una de las partes en conflicto, con el mismo
criterio o punto de vista aunque con otras palabras.
Ejemplos de
paráfrasis
Texto original: La iglesia estaba ya vacía. Dos
hombres esperaban ya en la puerta a Pedro Páramo, quien se juntó con ellos y
juntos siguieron el féretro que aguardaba descansando encima de los hombros de
cuatro caporales de la Media Luna.
Paráfrasis
mecánica: El templo había sido ya
desocupado. Un par de hombres aguardaban ya en la entrada a Pedro Páramo que se
unió a ellos y en compañía siguieron el ataúd que esperaba descansando en los
hombros de cuatro capataces de la Media Luna.
Paráfrasis
constructiva: Ya estaba la iglesia
vacía. En la puerta dos hombres esperaban a Pedro Páramo, los tres siguieron el
féretro que descansaba sobre los hombros de cuatro caporales de la Media Luna.
Paráfrasis en traducción:
Texto original en portugués: "A revisão do termo brutalismo
não seria nem possível nem completa, sem uma minuciosa releitura, entre outras
fontes pertinentes, do livro de Reyner Banham publicado em 1966, The New
Brutalism: Ethic or Aesthetic? "
Texto en español: "La revisión del término
brutalista no sería posible ni completa, sin una minuciosa relectura, entre
otras fuentes pertinentes, del libro de Reyner Banham publicado en 1966, The
New Brutalism: Ethic or aesthetic? "
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